Investigan jarabe para la tos relacionado con la muerte de 18 niños
El jarabe para la tos se encuentra bajo la lupa de las autoridades sanitarias, luego de que hace unas semanas, la Organización Mundial de la Salud (OMS), emitiera una alerta por la ingesta de un jarabe en Indonesia que provocó la muerte de más de 100 niños. Desafortunadamente, ahora se le relaciona con el fallecimiento de 18 niños en Uzbekistán.
Luego de que en Uzbekistán se vinculara un jarabe para la tos con el fallecimiento de 18 niños, a principios de esta semana, el regulador de medicamentos de la India, comenzó el día de hoy una investigación sobre el medicamento para niños Dok-1 Max, fabricado por Marion Biotech, en el estado de Uttar Pradesh, en el norte de la India.
De acuerdo con un comunicado emitido por el Ministerio de Salud de la India, se tomaron muestras del jarabe para la tos de las instalaciones de fabricación, las cuales ya se enviaron al Laboratorio Regional de Pruebas de Drogas para su análisis, afirmando que a se detuvo la producción del jarabe para niños Dok-1 Max.
Por otra parte, estudios de laboratorio del país Uzbeko demostraron que el fármaco contenía etilenglicol, una sustancia tóxica que puede ocasionar una lesión renal aguda, entre otras complicaciones. De acuerdo con información de la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, se trata de un químico incoloro, inodoro, pero con sabor a dulce que puede ser venenoso al ser ingerido.
Los síntomas más comunes de un envenenamiento por etilenglicol son náuseas, vómito,convulsiones, estupor o incluso entrar en un estado de coma, especialistas describen que esta sustancia ocasiona alteraciones en la química corporal que pueden ser suficientemente graves como para provocar un shock profundo, falla orgánica y la muerte.
De acuerdo con el gobierno uzbeko, los niños fallecidos, tomaron este medicamento en casa durante dos a siete días, de tres a cuatro veces al día, entre 2,5 a 5 ml, lo que excede la dosis estándar del medicamento para niños, señalaron las autoridades.
Sin embargo, en octubre de este año, India paralizó la producción de medicamentos de otra fábrica, después de que la OMS advirtiera sobre la probable relación de otro de sus fármacos que ocasionó la muerte de más de 60 niños en Gambia.