A un año de la tragedia de Polyplas, así está Villas Agrícolas

Hoy hace justo un año de la trágica explosión de la fábrica de plásticos Polyplas, en el barrio Villas Agrícolas, del Distrito Nacional. Aquel 5 de diciembre de 2018 cambió la vida de decenas de familias, muchas de las cuales viven todavía con los traumas psicológicos que les dejó esa experiencia.

Aproximadamente a las 11:30 de la mañana de aquel día, el estruendo provocado por la explosión de un enorme tanque de Gas Natural Licuado (GNL) destruyó y movió edificaciones, incluso, a kilómetros de distancia. El humo nubló parte del cielo capitalino y los medios de comunicación comenzaban a difundir minutos después la trágica noticia. La explosión causó la muerte de varias personas que estaban dentro de la fábrica.

En más de una semana de búsqueda, las autoridades pudieron determinar que, de los 288 empleados de la fábrica, ocho habían muerto; 103, entre empleados y vecinos del lugar, resultaron heridos, y, al menos, 22 vehículos fueron aplastados por los escombros y por los efectos de la poderosa onda expansiva que generó la explosión

La desesperación e intriga se veía en los rostros de los familiares de los desaparecidos. Toneladas de escombros limitaban la búsqueda de los cadáveres, mientras que en el barrio donde está la fábrica -Villas Agrícolas- 25 familias quedaban en las calles y eran trasladadas a albergues.

Más de 50 casas resultaron afectadas o colapsaron. Las pérdidas no se han cuantificado aún, pero las autoridades las han estimado de millonarias.

Fue tan fuerte el impacto, que, transcurrido este tiempo, muchos afectados siguen bajo terapias psicológicas. Tanto los habitantes del sector contiguo, como los empleados de la fábrica Polyplas.

Rosy Romero, residente en la calle 30 o Sagrario Díaz, misma que divide su vivienda de la fábrica, recuerda perfectamente aquel momento. Indica que desde aquel tiempo está yendo mensualmente al siquiatra, por problemas de insomnio y depresión.

“El doctor en la Plaza de la Salud me recetó el antidepresivo Foxetin, y para poder dormir, Quetiazic. La empresa Polyplas también ha proporcionado personal médico permanente para que nos atienda”, dice la dama, mientras recuerda la intensidad de la devastadora onda expansiva.

Tanto el gobierno como la empresa de plásticos han construido y reconstruido decenas viviendas, dos centros educativos, una guardería infantil, la cancha del Club Los Pioneros y otras edificaciones. La totalidad de las familias afectadas ya recibieron la remuneración económica correspondiente.

Dentro de la fábrica, la parte que fue más afectada, fue limpiada por completo y allí se puede ver el solar vacío. La fábrica de plásticos colocó una gran barrera de aluzinc alrededor de toda la zona del desastre. Otros edificios o naves que resultaron menos afectados fueron restablecidos.

El presidente de la Junta de Vecinos de Villas Agrícolas, Clarence Veras, afirma que la empresa TransGas, la misma que suplía de gas natural a Polyplas, a través de seguros Sura, ha cumplido en más de un 99% a los afectados y que, si alguien no ha sido indemnizado, es porque no hizo el esfuerzo de reportar daños.

“Polyplas nos garantizó que ya no usarán gas como combustible, todo será eléctrico. En ese lugar que quedó devastado solo harán almacenes, y, ellos tienen un proyecto muy ambicioso con Infotep, para ayudar a los jóvenes del barrio a superarse”, expresa Veras.

Polyplas y el seguimiento a los afectados

La empresa Polyplas Dominicana informó a través de un comunicado que para honrar la memoria de las víctimas realizará un acto conmemorativo.

“Desde el pasado diciembre de 2018, nuestra prioridad, ha sido propiciar el bienestar integral de nuestra gente. Nos movilizamos de forma ágil y proactiva, robusteciendo los sistemas de seguridad, pero sobre todo proveyendo, en todo momento, el apoyo emocional y económico que fue requerido en tiempos como los que vivimos”, indica la nota enviada a Diario Libre.

Agregan que, durante este tiempo se gestionaron indemnizaciones y reparaciones de daños para aproximadamente 800 personas afectadas incluyendo residentes de la comunidad, empleados de la empresa y los familiares de los colaboradores fallecidos en la explosión.

De los programas de auxilio que continúan vigentes y que hasta la fecha han beneficiado a 218 personas, de estas 118 han sido mujeres y niños, resaltan la asistencia psicológica y psiquiátrica, a través de los especialistas del Centro Vida y Familia.

“La difícil experiencia que vivimos nos permitió evaluar nuestras fortalezas y oportunidades como empresa y proponernos nuevas metas encaminadas a buscar la excelencia en todos nuestros procesos. Hemos querido tomarnos el tiempo necesario para la reconstrucción de nuestras instalaciones contando con maquinaria de la más alta tecnología y contemplando los más altos estándares de seguridad”, dice Polyplas en su documento.

Expresa que una de las decisiones tomadas a raíz del siniestro fue hacer cambios importantes en las operaciones, sustituyendo la tecnología utilizada hasta el momento, y migrando hacia el uso de maquinarias que funcionen exclusivamente a base de energía eléctrica. Esta medida será preservada inclusive después de alcanzar la restauración total de la fábrica, señala.